¿Último round para el béisbol cubano?

El próximo lunes comienza el Preolímpico de Béisbol de las Américas / Foto: ACN

 

Tras no poder asegurar la plaza olímpica destinada al mejor equipo del continente americano en el pasado Premier 12, la selección cubana de béisbol ya se encuentra en suelo estadounidense para pugnar, a partir del próximo día 31, por el único boleto que otorgará el Preolímpico de las Américas, que se desarrollará en la Florida.

Con 26 efectivos… bueno, 25, porque nada más aterrizar en tierras norteamericanas el cienfueguero César Prieto abandonó la delegación caribeña, los dirigidos en esta ocasión por el manager Armando Ferrer intentarán lograr lo que para muchos es una misión casi imposible.

¿Quién lo diría? Tras tres medallas de oro y dos de plata, que convierten a Cuba en el rey del béisbol olímpico, son pocos los que le dan papeletas para asistir a Tokio 2020, evento para el que ya están garantizados Israel, Corea del Sur, México y el local Japón.

Además del único boleto directo (reservado para el ganador de la lid), el certamen de la Florida le garantiza al segundo y tercer lugar el derecho a intervenir en otro torneo clasificatorio (el último), que se efectuará en junio venidero, en México. Este estaba programado para Taipéi de China, pero la situación sanitaria de ese país se ha complejizado en los últimos días y se decidió mover la sede a suelo azteca.

Por lo tanto, la misión de los cubanos es, como mínimo, finalizar terceros para tener chances de llegar a un hipotético round 3, donde quedarían definidos los seis elencos que harán el viaje a la nación del sol naciente.

Lo cierto es que ha llovido bastante desde el subtítulo en Beijing 2008, la última incursión de la pelota en una cita estival, y si en aquellos tiempos liderábamos el ranking de la Confederación Mundial de Béisbol y Softbol, varios factores, como la emigración de talentos, y las carencias económicas y materiales han provocado un retroceso importante en nuestro deporte nacional, y de aquel lugar cimero, ahora andamos por el séptimo escalón.

Desde la cita china hasta la actualidad hemos visto al equipo de las cuatro letras tropezar en cualquier cantidad de eventos y contra rivales de todos los calibres. Algo que tiene mucho que ver con el cambio de filosofía que ha experimentado el béisbol, en el que la tecnología y la sabermetría han convirtiendo este deporte en un combate táctico donde la victoria se puede lograr mucho antes de entrar al terreno.

De momento las cosas no han comenzado nada bien. La preparación, que tuvo por sede al “Victoria de Girón” matancero, se vio afectada en más de una ocasión por la Covid-19, después empezó el show político del visado, que por suerte se resolvió, y para rematar, César Prieto, que debía ser la segunda base titular y primer bate del conjunto no llegó ni al hotel de concentración.

Imagino que nadie dude de que Cuba tiene potencial para llevarse ese pasaje a Tokio, ya sea en este o en el evento clasificatorio. Pero también es real que la misión parece estar por encima de los pronósticos de esta selección. 

 

Lo que nos queda ahora es apoyar todo lo que podamos y confiar que esta vez se harán bien las cosas para que los peloteros cubanos puedan representarnos en suelo japonés.

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