A coger el toro por los cuernos (+video)

Los santiagueros deben tener paciencia para superar el pitcheo camagüeyano       Foto: Jorge Luis Guibert García

Tras superar dos juegos a uno a los Alazanes de Granma, quedó servida la escena para el tope estrella de los próximos enfrentamientos particulares en la 59 Serie Nacional de Béisbol, que no puede ser otro que el Camagüey-Santiago, o lo que es lo mismo, el líder contra el sublíder.

Cómo cambian las cosas de un año para otro. A estas alturas de la pasada campaña, las Avispas luchaban para hacerse de un puesto en los play-off de repechaje (que al final perdieron 2-0 ante los Gallos de Sancti Spíritus) y hoy hablamos de disputar la cima del torneo, a la que ahora mismo están a solo media rayita, con balance de 24 victorias y 12 derrotas. Son de esas cosas que hacen al deporte tan bello como impredecible.

Este viernes el “Guillermón Moncada” se vestirá de gala, como en aquellas noches de antaño, para recibir al equipo sensación del campeonato, los Toros camagüeyanos (24-11). Un duelo entre dos elencos que han tenido una trayectoria casi calcada en esta Serie.

Ambos llegan con ocho victorias en los últimos 10 partidos, con 24 sonrisas (ninguno más que ellos), un bateo colectivo superior a los .300 (.310 los indómitos, cuartos, y .303 los agramontinos, quintos) y sus lanzadores tienen una efectividad de carreras limpias por debajo de cuatro (3,01 los santiagueros, líderes, y 3,83 los camagüeyanos, terceros).

Hasta en la mala defensa se parecen, pues los dos comenten más de un error por partido y su promedio está por debajo de la media de la lid.

Definir un favorito en este duelo es bastante complicado. Imagínense, la tropa del experimentado manager Miguel Borroto es la que mejor lo hace como visitante en todo el certamen (11-3) y los montañeses son los segundos mejores locales (13-5), así que olviden una barrida por parte de alguno.

Tampoco es que el ganador de la subserie tendrá garantizado quedar en lo más alto de la tabla, pues le recuerdo que aún quedaría otros seis partidos y detrás vienen agazapados los Cocodrilos de Matanzas (tercero con 23-12), justamente, el rival con el que cerrarán el calendario regular los santiagueros.

Ahora bien, repasemos las opciones de que los “rojinegros” terminen de asegurar un lugar en la segunda etapa de la 59 Serie de forma directa.

Los pupilos del profesor Eriberto Rosales están dos juegos por encima de los Elefantes de Cienfuegos (quintos con 22-14), así que para no bajar del top-4 tienen como número mágico el siete. O sea, les vale ganar siete, o que los cienfuegueros pierdan esa misma cantidad, o que se combinen cuatro victorias santiagueras con cuatro fracasos de los sureños. No olviden que, en caso de empate, los de la Perla del Sur tienen ventaja, pues ganaron el duelo particular (2-1).

Tampoco podemos ignorar a los actuales campeones, los Leñadores tuneros, que marchan quinto con 21-14, a dos y medio de las Avispas. Pero si se cumple lo antes explicado, no serán un problema para los nuestros. 

Nada, que ni con 24 éxitos puede andar uno confiado. Lo importante es que estamos cerca del primero objetivo y a los muchachos se les ve con la fuerza suficiente para rematar, algo que en otras campañas no ocurría. Nos vemos en el “Guillermón”.