Una tarde diferente

Ana Fidelia y Juantorena respondieron a todas las preguntas del auditorio         Fotos: Colaboradora

El periodismo nos da la posibilidad de conocer lugares, personalidades, ídolos de tu niñez, entre muchas cosas. A mí me ha abierto las puertas para estrecharle la mano o conversar con atletas estelares, de esos que antes solo podía ver a través de la televisión.

Investigar las hazañas de los multicampeones del atletismo Ana Fidelia Quirós y Alberto Juantorena, ambos nacidos en la provincia de Santiago de Cuba, te puede llegar a encandilar por tantos momentos inolvidables; pero escucharlos a ellos en persona hablar sobre esos instantes cargados de emociones, no tiene comparación.

Esa fue el regalo que me obsequió, en una de sus jornadas, el curso de posgrado internacional de Periodismo Deportivo, que organiza el Instituto Internacional de Periodismo José Martí, en La Habana. Al alcance de un abrazo, así de cerca tuve a los estelares excorredores de carreras de mediofondo.

Durante el fraternal encuentro, los campeones mundiales recordaron varias de sus mejores exhibiciones, respondieron a todas las preguntas del auditorio y posaron para decenas de fotografías con los estudiantes del curso.

En el conversatorio, Alberto Juantorena, que además se desempeña como vicepresidente de la IAAF (Federación Internacional de Atletismo Asociado, por sus siglas en inglés), confirmó que actualmente se hacen varias gestiones para instalarle una nueva pista de rekortán, a la “José ‘Pepe’ del Cabo”, de la Ciudad Héroe.

Un placer fue para mí compartir con estos grande de las pistas

Ambos analizaron el momento actual que vive el llamado “deporte rey” en la Mayor de las Antillas, que al decir de Juantorena: “Tenemos talentos suficientes para mantenernos en la élite de varias pruebas; aunque nuestra asignatura pendiente son los eventos de pista, donde los resultados distan de las aspiraciones”.

Por supuesto que no faltaron las anécdotas que vivieron ambos atletas con el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz. Y antes del adiós, recibieron el reconocimiento de los periodistas por sus formidables carreras deportivas: una cerrada ovación.