Sin invicto, pero con etiqueta

Jorge Villalón (a la derecha) es uno de los máximos artilleron del equipo santiaguero     Foto: Jorge Luis Guibert

Que a nadie se le ocurra pensar que por haber caído en dos partidos seguidos los Diablos Rojos han perdido la etiqueta de favoritos a retener el título del fútbol cubano en el 103 Campeonato Nacional, que acaba de concluir su etapa clasificatoria.

Antes de que cunda el pánico en los parciales santiagueros, hay que analiza en qué instancias llegaron esos resbalones. Los muchachos del profesor Leonardo Herrera cayeron en sus dos últimas presentaciones, cuando ya eran –desde hace días- los ganadores del Grupo 1 y el elenco que más puntos sumó (26) en las dos vueltas de la lid.

Esto, señores, influye, porque los jugadores pueden relajarse un poco al saberse ya clasificados. Además, también hay que valorar el desgaste físico al que han sido sometidos, con partidos –bajo el intenso sol- cada tres días, desde el 19 de febrero pasado. Una verdadera paliza.

Es cierto que las derrotas siempre acarrean escepticismo, pero pongámonos a pensar con detenimiento lo hecho por los Diablos antes de caer (1-2) ante La Habana y (0-1) con Sancti Spíritus.

Pasaron 695 días desde que Santiago de Cuba perdió su último partido en el Campeonato Nacional de Fútbol. Casi dos años después, el once de la “tierra caliente” vio rota una cadena en la que se incluyen su primera corona en torneos domésticos y unos números estadísticos de los mejores que se recuerden en estos torneos, 68 goles a favor y solo 14 en contra.

Como dato interesante, y para los que se preguntan si los 38 juegos invictos son récord, les cuento que la marca de duelos seguidos sin perder para el fútbol cubano lo tiene el Club Deportivo de San Francisco, que entre 1957 y 1958 mantuvo inmaculada su casilla de derrotas durante 45 choques. Después, viene esta de los Diablos.

En definitiva, los “rojinegros” culminaron en la cima de la llave 1, con 26 unidades (ocho ganados, dos empates e igual cantidad de perdidos), 20 tantos a favor y seis permitidos. En todos estos acápites, el mejor de los 12 participantes. El otro elenco que avanzó en este apartado fue Sancti Spíritus (16), que dejó con las ganas a Las Tunas (15) y La Habana (10).

En tanto, en la agrupación 2 se hicieron con los boletos Pinar del Río (22) y el actual subcampeón Camagüey (17). Luego quedaron resignados Cienfuegos (17) e Isla de la Juventud (11). Y en el 3, Ciego de Ávila lideró con 23, con Granma (18) como escolta y segundo clasificado. Aquí la sorpresa fue la eliminación de Villa Clara (10), que quedó último, por detrás de Guantánamo (14).

Lo del Expreso del Centro es llamativo, pues no solo quedaron fuera de la Liguilla final, sino que al ser uno de los dos peores del certamen (el otro fue el conjunto habanero), tendrá que jugar el Torneo de Ascenso del próximo año.

En cuanto a los goleadores, son comandados por el granmense Ruslán Batista y el avileño Jesús Rodríguez, ambos con seis. Los mejores por “Santiago” son Rolando “Pitín” Abreu, Jorge “El Villa” Villalón y Erick “Pocho” Rizo, todos con tres. 

Ahora llega el momento decisivo, cuando los seis contendientes se refuercen y vayan por el trono. Ahora, es cuando veremos qué tan favoritos son los Diablos.